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Autoridades Locales

Comité de Autoridades Locales de la IS en Budapest

24-25 de octubre de 2000

El Comité de Autoridades Locales se reunió en Budapest los días 24 y 25 de octubre con el Partido Socialista Húngaro, MSzP, como anfitrión.

El tema principal de la reunión presidida por Hermes Binner (Alcalde de Rosario, Argentina), presidente del Comité, fue "Democracia y Autoridades Locales", en cuyo contexto se abordaron otros temas como "Las autoridades locales y las organizaciones de la sociedad civil" y "La dimensión política y financiera del gobierno local en el Estado moderno".

El Comité declaró que las ciudades son una fuerza viva para los esfuerzos colectivos, capaz de integrar a las personas, que provee orientación política para el logro de la justicia social y la plena participación de los ciudadanos en el proceso político.

Tanto el viejo principio de "pensar globalmente y actuar localmente" como el relativamente nuevo de la subsidiaridad fueron respaldados fuertemente por el Comité. La aplicación eficiente de estos principios en la práctica puede asegurar que las decisiones que conciernen a los ciudadanos se tomen en los niveles correspondientes más adecuados. La aplicación del principio de subsidiaridad obliga al gobierno central a respetar los canales de consulta con las autoridades locales y promueve un mayor grado de consultas entre los niveles local, regional e internacional. La práctica eficiente de este principio también ofrece la posibilidad de combatir todas las formas de centralización y burocratización, que generan apatía política entre los ciudadanos.

Tampoco debemos olvidar que mediante el mejoramiento de la democracia local se ha de crear un equilibrio entre la labor por los derechos democráticos y las libertades, por un lado, y la lucha permanente por las causas sociales, por el otro. Ambas apuntan a defender los derechos humanos pero con el énfasis puesto en la lucha contra el desempleo, la crisis económica, la corrupción, la violencia, las drogas o las diferentes formas de discriminación. Es en este contexto donde analizamos constantemente los efectos de fenómenos nuevos, tales como los cambios de la economía mundial, el papel del Estado en la sociedad, el "boom" de la tecnología de las comunicaciones y la información, al igual que la transformación de los valores culturales y humanos. Estamos convencidos de que la respuesta a estos desafíos —entre ellos el fortalecimiento de la democracia local, la participación de los ciudadanos en la toma de decisiones, la descentralización del poder y la solidaridad con la gente rezagada de la sociedad- ofrece un marco eficiente para que las autoridades alcancen logren su misión principal: el servicio al pueblo.

Las autoridades locales deberían estimular el desarrollo de la sociedad civil al organizar cursos, clubes y foros para los ciudadanos, otorgando apoyo político y financiero para la realización de nuevas iniciativas y organizaciones, grupos o asociaciones. Han de ofrecer su apoyo para crear el fundamento legal y financiero apropiado para el funcionamiento de estas organizaciones. Deben reaccionar positiva y flexiblemente ante las nuevas y positivas acciones de las organizaciones civiles; sean éstas en el campo de los asuntos medioambientales, de la salud, de la vivienda, de la ayuda a los desamparados y a los más necesitados, de la protección de los huérfanos, de la lucha contra la criminalidad y las drogas, de la representación de los intereses de las mujeres, las minorías étnicas, los inmigrantes y otros. Sociedad civil fuerte significa democracia fuerte y democracia fuerte significa autogobiernos locales fuertes.

Los participantes de la reunión intercambiaron opiniones sobre las diferentes prácticas de financiación local. Estuvieron de acuerdo en que el mecanismo de la redistribución financiera ha de respetar los principios de solidaridad e imparcialidad entre las autoridades locales ricas y pobres. Hemos de hacer todo contra la distribución desigual de las potenciales fuentes de financiación, mediante el fortalecimiento de procedimientos que garanticen la autonomía financiera de las autoridades locales y su libertad fundamental de ejercer una política discrecional dentro de su jurisdicción. Por otro lado, la transparencia y el control público efectivo de las finanzas locales son esenciales.

La Internacional Socialista, declaró el Comité, ha de iniciar la elaboración y adopción de una Carta Internacional de las Autoridades Locales. Este documento resumirá los principios compartidos por la Internacional en el mundo entero en este campo, al tiempo que establecerá los criterios mínimos de derechos y responsabilidades de las autoridades locales en la sociedad democrática del siglo 21.

Las discusiones y conclusiones del Comité quedaron resumidas en la Declaración de Budapest.

Lista de participantes

 


DECLARACION DE BUDAPEST

Original: inglés

Las ciudades, en virtud de su proximidad a los ciudadanos, siguen siendo las unidades céntricas de la democracia, así como el lugar donde los cambios demandados por la sociedad civil pueden efectuarse.

Para socialdemócratas y este Comité, las ciudades son una fuerza viva de construcción colectiva, capaz de integrar lo disgregado, de direccionar políticamente con un sentido social igualitario y de generar y ampliar espacios participativos en la definición de todas la políticas.

Esto fue el enfoque básico de la reunión del Comité de Autoridades Locales de la Internacional Socialista, dedicada al tema "Democracia y Gobierno Local". En el marco de este tema los participantes discutieron cuestiones concernientes a los diferentes conceptos de democracia y de autonomía local existentes en el mundo, a las similitudes y particularidades que pueden encontrarse en el papel que las autoridades locales desempeñan en el fortalecimiento de la democracia, y a la posición adoptada por los socialistas y socialdemócratas a este respecto. Los participantes del diálogo dedicaron especial atención a las relaciones entre las autoridades locales por una parte y la sociedad civil por la otra, así como a la independencia financiera de las autoridades locales considerada como condición previa para la descentralización real del poder.

La reunión subrayó que las autoridades locales constituyen uno de los pilares más importantes de la democracia. En cualquier forma en que se manifieste, la participación creciente de los ciudadanos sigue siendo el modelo de la democracia representativa y, junto con la descentralización del poder, constituyen dos principios genuinos de la socialdemocracia universal. La prevalencia de estos dos principios ha de ser garantizada por procedimientos electorales democráticos. En el mismo tiempo se expresó que para los socialistas y los socialdemócratas la democracia no se limita a votar en las elecciones. La democracia es mucho más que ésto. Es un proceso en que se aprende la vida democrática, en particular en el caso de la gente joven, y una amplia campaña informativa antes de la toma de decisión. Sirve para identificar oportunidades genuinas de acción, diálogo e integración de los ciudadanos. Significa entrada libre a las oficinas locales, garantizada a todos los ciudadanos, con igualdad genuina entre los hombres y las mujeres en el ejercicio del poder. En síntesis, significa el carácter abierto y la transparencia de las autoridades locales, así como la participación de los ciudadanos en el proceso de toma de decisión.

En el mismo tiempo, el proceso de toma de decisión se está cambiando constantemente en todo el mundo. La apariencia y las interrelaciones entre los niveles local, regional, internacional y hasta transnacional en muchas esferas de nuestra vida crean dificultades para aquellos ciudadanos que deseen tener una voz más fuerte en las decisiones políticas que afecten su propio ambiente. El método tradicional y más simple de organizar un referéndum o un plebiscito sobre cuestiones cada vez más complicadas satisface cada vez menos las necesidades democráticas. A menudo resulta no más que cargar la responsabilidad de los políticos sobre las espaldas de los ciudadanos que no están lo suficientemente preparados para hacer un inventario de los problemas. Ello es especialmente relevante en el caso de la incorporación a organizaciones internacionales — tales como la Unión Europea — donde el complejo proceso de toma de decisión y la participación de los ciudadanos constituyen un dilema apremiante para los Estados Miembro. Una solución de este problema puede ser el reforzamiento del viejo principio de "pensar globalmente y actuar localmente" y el del principio relativamente nuevo de la subsidiaridad. Ambos gozan de nuestro fuerte apoyo. La aplicación eficiente de estos principios en la práctica puede asegurar que las decisiones concernientes a los ciudadanos se tomen en los niveles correspondientes más adecuados. La aplicación del principio de la subsidiaridad obliga al gobierno central a respetar los canales de consultas con las autoridades locales y promueve las consultas más intensivas entre los niveles local, regional e internacional. Ayuda a distribuir, esclarecer y garantizar los derechos y las responsabilidades entre los diferentes niveles de toma de decisión e indica la mejor manera dónde se puede echar mano de la solidaridad. La práctica eficiente de la subsidiaridad también ofrece la posibilidad de combatir toda forma de centralización y de burocratización que conduce a la apatía política de los ciudadanos.

Por otro lado, estos principios pueden ser aplicados con eficacia si los ciudadanos están preparados para aprovechar la mejor de sus oportunidades, es decir, a hacer uso de sus derechos y a defender sus intereses. Se plantea la cuestión de renovar el sistema educacional mediante la toma en consideración de los nuevos requerimientos de la globalización, la posibilidad de acceso a los sistemas de comunicación generalmente usados en el mundo, así como la importancia creciente del flujo de informaciones en los niveles local, regional e internacional. En este sentido el precipicio cada vez más ancho entre los diferentes partes del mundo es uno de los motivos más importantes por lo que la Humanidad se divide en ricos y pobres, en desarrollados y subdesarrollados, en integrados y atrasados, en vencedores y vencidos de la globalización. Las autoridades locales pueden hacer mucho para cerrar este precipicio mediante la preparación de sus ciudadanos a encontrar sus actividades en esta esfera. Al entrar al Siglo 21, vemos surgir la apremiante necesidad de encontrar modos nuevos para realizar la democracia local. Los desafíos nuevos de nuestro mundo requieren respuestas nuevas.

Tampoco debemos olvidar que mediante el mejoramiento de la democracia local se ha de crear el equilibrio entre la labor por los derechos y libertades democráticos por un lado y la lucha permanente por las causas sociales, por el otro. Ambos apuntan a defender los derechos humanos pero con el énfasis puesto en la lucha contra el desempleo, la crisis económica, la corrupción, la violencia, las drogas, o las diferentes formas de discriminación. En este contexto estamos analizando constantemente los efectos de fenómenos nuevos tales como los cambios de la economía mundial, el papel del Estado en la sociedad, el "boom" de la tecnología de comunicaciones y de información, así como la transformación de los valores culturales y humanos. Estamos convencidos de que la respuesta a estos desafíos — entre ellos el fortalecimiento de la democracia local, la participación de los ciudadanos en la toma de decisión, la descentralización del poder y la solidaridad con la gente rezagada de la sociedad — ofrece un marco eficaz a las autoridades locales para realizar su misión principal: el servicio al pueblo.

El desarrollo de la cultura de diálogo entre los actores políticos y administradores por un lado y los ciudadanos, agrupaciones sociales, asociaciones y representantes del mundo de la economía, así como otros actores de la sociedad civil, por el otro, ha de ser esencial. La promoción de la construcción de una sociedad civil amplia y fuerte es la condición previa de la participación eficaz de los ciudadanos en la vida de las autoridades locales, ofrece más posibilidades para representar y defender los intereses de la gente frente a las instituciones del poder. También puede ser un instrumento para construir alternativas nuevas a la contradicción entre el Estado y el mercado, un mediador activo para llegar al consenso en cuestiones comunes, el promotor de la cohesión social a veces olvidada. Las organizaciones de la sociedad civil y las autoridades locales pueden construir puentes entre los individuos y el poder, cerrar el precipicio entre la política y la sociedad. La sociedad civil puede controlar el sector público y así asegurar la transparencia y el carácter abierto de las autoridades locales.

El desafío más grande en reconocer el importante papel del "tercer sector" estriba en su diversidad, en los niveles diferentes de preparación, en los modos a veces divergentes de funcionar, actuar o pensar. En el mismo tiempo, ello no puede ser un obstáculo ante la cooperación con la sociedad civil. Al contrario, a nuestro juicio, las autoridades locales pueden sacar provecho de esta diversidad, necesitan el control de la sociedad civil mediante la organización de cursos, clubes y foros para los ciudadanos, dando apoyo político y financiero a la creación de nuevas iniciativas y organizaciones, grupos o asociaciones. Han de dar su apoyo para crear el oportuno fundamento democrático legal y financiero para el funcionamiento de estas organizaciones. Han de tener reacciones positivas y flexibles a las acciones positivas y nuevas de las organizaciones civiles, en el campo del medio ambiente, de la salud, de la vivienda, de la ayuda a los desamparados y a los más necesitados, de la protección de los huérfanos, de la lucha contra la criminalidad y las drogas, de la representación de los intereses de las mujeres, minorías étnicas, inmigrantes y otros. Sociedad civil fuerte significa democracia fuerte y democracia fuerte significa autogobiernos locales fuertes.

Los participantes de la reunión intercambiaron opiniones sobre las diferentes prácticas de financiación local. Expresaron que las diferentes tradiciones históricas concernientes a los autogobiernos locales y a las relaciones entre las autoridades locales y el poder central se reflejan en los sistemas fiscales. En el mismo tiempo afirmaron que en este campo algunos principios y directrices comunes han de ser respetados. A su juicio las autoridades locales en el marco de la política económica nacional han de obtener el derecho a tener suficientes recursos financieros propios y a disponer de ellos libremente dentro de su esfera de competencia. Los recursos han de corresponder a las responsabilidades dictadas por la constitución y por la ley. El mecanismo de la redistribución financiera ha de respetar los principios de solidaridad e imparcialidad entre las autoridades locales ricas y pobres.

La democracia local puede ser limitada de varias maneras. El método más común empleado por los gobiernos centrales en las diferentes partes del mundo es la restricción financiera o la distribución de los recursos a base de consideraciones político-partidarias. Los participantes subrayaron que el principio de autogobierno local se basa en objetivos de largo plazo que incorporan a la gente a la organización de su propia vida y que apuntan a darle los mejores servicios a cambio de los impuestos u otras contribuciones pagadas por servicios que presta exclusivamente el Estado. Significa que la discriminación política en la financiación de los gobiernos locales es simplemente una política de fuerza, contraria a este principio. Hemos de hacer todo contra la distribución desigual de las potenciales fuentes de financiación, mediante el fortalecimiento de los procedimientos y medidas que garanticen la autonomía financiera de las autoridades locales y su libertad fundamental de ejercer una política discrecional dentro de su jurisdicción. Por otro lado, la transparencia y el control público efectivo de las finanzas locales son esenciales. Sin el respeto de estos principios, el funcionamiento democrático de las autoridades locales queda en tan solo un objetivo.

Como conclusión de la reunión, los participantes llegaron a común acuerdo en cuanto la Internacional Socialista ha de iniciar la elaboración y la adopción de una Carta Internacional de las Autoridades Locales. Este documento resumirá los principios compartidos por la Internacional en el mundo entero en este campo y también establecerá los criterios mínimos de derechos y responsabilidades de las autoridades locales en la sociedad democrática del siglo 21.

En el marco de la reunión se celebró una sesión especial en que se conmemoró el 10 aniversario de la creación de las autoridades locales nuevas en Hungría. Los oradores de la sesión hicieron un recuento de los pasados diez años subrayando los éxitos y las dificultades del desarrollo de la idea y de la práctica del autogobierno en el país anfitrión. Dando un ejemplo concreto, el del caso concreto de Hungría, de la transformación económica y política que había conducido a la instauración del sistema democrático, subrayaron el papel importante de las autoridades locales en dicho proceso. Asimismo expresaron que los socialistas húngaros se oponen activamente a las tendencias centralizadoras lanzadas por el gobierno actual que no se limitan a la esfera de actividades de las autoridades locales sino se extienden al desarrollo próspero de esta democracia nueva en la región de Europa Central y Oriental.


LISTA DE PARTICIPANTES


Presidente del Comité
Hermes Binner
(Argentina, PSP)


Secretario General de la IS
Luis Ayala


ALEMANIA
Partido Socialdemócrata de Alemania, SPD
Norbert Burger


ARGENTINA
Partido Socialista Popular, PSP
Juan Carlos Zabalza


AUSTRIA
Partido Socialdemócrata de Austria, SPÖ
Andreas Schieder


BULGARIA
Izquierda Europea
Ivelin Zheliazkov


GRAN BRETAÑA
Partido Laborista
Howard Knight


GRECIA
Movimiento Panhelénico Socialista, PASOK
Theoni Kaveta


HUNGRIA
Partido Socialdemócrata Hüngaro, MSzDP
László Kapolyi


HUNGRIA
Partido Socialista, MSzP
Gyula Horn
Mónika Lamperth
Vilmos Szabó
Éva Ádám
Lászlóné Csabai
József Papp
József Tóth
György Herczeg
György Hegyi


ITALIA
Demócratas de Izquierda, DS
Carlo Paolini


MARRUECOS
Unión Socialista de las Fuerzas Populares, USFP
Ben El Cadi


MEXICO
Partido Revolucionario Institucional, PRI
César Camacho Quiroz


PORTUGAL
Partido Socialista, PS
José Conde Rodrigues


RUMANIA
Partido Socialdemócrata Rumano, PSDR
Ioan Pop


SUECIA
Partido Socialdemócrata Sueco, SAP
Annelie Stark


TERRITORIOS BAJO AUTORIDAD PALESTINA
PALESTINE
Fatah
Khaled Ghazal
Rana Miqdadi


Secretariado de la IS
Latifa Perry


Invitados:

UCRANIA
Viktor Biryukov
Alexandr Moros
Witalij Schubko

 

 



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